LO QUE NOS SACAN VA AL PAGO DE UNA DEUDA IMPUESTA E INNECESARIA QUE ELLOS GENERAN 

*Por Fabricio Bolatti

 

En menos de dos años de gestión, el gobierno de Javier Milei lleva adelante el “ajuste más grande de la historia” y, al mismo tiempo, registra el mayor incremento de deuda pública en décadas. Sin embargo, no hay dólares en las reservas ni pesos en los bolsillos. ¿Cómo se explica esta contradicción? 

Si se ajusta, debería haber ahorro. Si se toma deuda, deberían ingresar dólares. Pero lo que vemos es lo contrario: se toma deuda por USD 20.000 millones con el FMI, se recorta la obra pública, y no aparece ni un billete verde, ni se cuenta con fondos del ajuste para atender lo urgente. 

 

Ajuste y empobrecimiento

Ajuste significa bajar el gasto y la inversión pública. Su consecuencia directa es desfinanciar políticas sociales, reducir ingresos previsionales y debilitar el Estado.

  • En 2015, la jubilación mínima equivalía a USD 455. Hoy no supera los USD 220.
  • El salario mínimo pasó de USD 580 en 2015 a USD 283 en la actualidad.
  • El programa Progresar tenía 800.000 beneficiarios que cobraban USD 80 mensuales. Hoy son 300.000 y reciben apenas USD 23.

 

Deuda y fuga: una novela repetida por el liberalismo

La historia se repite con distintos actores, pero con el mismo resultado: alto endeudamiento, fuga de capitales y empobrecimiento.

  • Macri tomó USD 44.000 millones del FMI y aumentó la deuda externa en más de USD 100.000 millones. El Banco Central reconoció que se fugaron USD 86.000 millones. La pobreza alcanzó el 40,8%.
  • Milei ya endeudó al país en más de USD 90.000 millones. En apenas mes y medio, se fugó el 44% de las divisas del crédito del FMI, a pesar de que el acuerdo prohibía ese destino.

Entonces, si el ajuste libera recursos y la deuda trae dólares: ¿dónde están esos fondos? La respuesta es clara: la riqueza del pueblo se fugó en manos de fondos buitres y especuladores financieros. Por el nivel de daño económico, esto debería llamarse saqueo.

 

El modelo del saqueo: pasos del proceso que nos empobrece

  1. Se extrae la riqueza del pueblo: inflación, tarifas sin subsidios, devaluaciones, ajuste estatal, desempleo, privatizaciones.
  2. Se diseña un sistema financiero que garantiza rentabilidad sin riesgo para bancos, fondos buitres y especuladores.
  3. Se permite la libre entrada y salida de capitales, sin control sobre su destino.
  4. Se legaliza el procedimiento con normativa afín y se evaden responsabilidades ante una justicia dependiente.

Como un ilusionista, el modelo hace desaparecer la riqueza que costó años generar: se favorece la especulación financiera por sobre la inversión productiva; se pagan intereses altísimos por inversiones que no generan empleo ni desarrollo; y el Estado debe pagar esas ganancias, que figuran como gasto en el Presupuesto, ajustando salud, educación y jubilaciones.

 

El verso del superávit liberal

Durante los gobiernos liberales fue común ver a Cavallo hablar de déficit y ajuste. Lo hizo la dictadura, lo hizo Menem, Macri y ahora Milei.

  • En los presupuestos de Macri, la partida de intereses pasó de $120.000 millones a $914.000 millones en cuatro años.
  • Emitieron bonos a 100 años.
  • Generaron intereses valuados hoy en más de USD 30.000 millones de dolares desde el Tesoro, y otro tanto desde el Banco Central.
  • Esa “mochila” se paga con ajuste.
  • Cuando hablan de “superávit”, se refieren al gasto que no se ejecuta, para destinarlo al pago de intereses. Si no alcanza, se paga con más deuda.

 

¿Quién generó la dependencia financiera?

  • En 2015, la deuda externa era el 13,7% del PBI (USD 69.000 millones).
  • Al final del mandato de Macri, llegó al 69% del PBI (USD 271.000 millones).
  • Tomó USD 103.000 millones en nueva deuda (no destinada a refinanciar), que no se usó para inversión ni desarrollo, sino para financiar fuga de dólares.

Más de USD 86.000 millones se destinaron a pagar rentas financieras con tasas del 15% anual en dólares, cuando en el mundo se conseguía un 3%. El Estado garantizó esas ganancias, generando inflación, ajuste y más deuda. La última gran operación fue financiada por el FMI, con el crédito más grande de su historia.

 

“No es magia. Es decisión política”

No es casualidad ni error. No es magia. Es decisión política. Ajustan, endeudan y empobrecen, mientras la riqueza se va por la puerta grande y el pueblo queda mirando cómo desaparece lo suyo.

Hoy Milei es el ejecutor de ese modelo. El encargado de garantizar que los poderosos sigan cobrando ganancias obscenas a costa del hambre y la miseria de las mayorías. Y no lo oculta: según sus propias palabras, está dispuesto a hacer lo que sea para cumplir con ese mandato.

Ellos son los responsables de que cada día haya más pobreza, más deuda y menos futuro. Y no lo hacen por ignorancia: lo hacen porque defienden intereses que no son los del pueblo.

Frente a ese plan de entrega, sumisión y saqueo, nosotros elegimos otro camino: el de la soberanía, la justicia social y la dignidad. Porque todavía hay quienes creemos que otra forma de hacer política es posible, y que es el pueblo el que tiene que decidir su destino.

 

*Actual concejal de Resistencia

Candidato a Diputado Nacional por la Lista 180Nueva Etapa

Partido Proyecto Sur

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