INFORME PRIMER SEMESTRE 2024 – Municipio de Resistencia

*Sobre aspectos de la situación económica y presupuestaria de la gestión de Roy Nikisch

Observamos en el actual gobierno municipal de Resistencia, características y coincidencias con la gestión de Gustavo Martínez, incluso en ocasiones, hasta parecieran rescatarse muchos aspectos de lo realizado. No hay que olvidar que quienes hoy gobiernan, fueron quienes acompañaron y sumaron los votos que garantizaron y permitieron avanzar en muchos de los temas que hoy ‘cuestionan’, promoviendo normas ilegales. Un claro ejemplo de ello fue el impuestazo 2020, que en esta gestión se reproduce con la Tributaria 2024 que impulsó Nikisch y la hizo aprobar con solo seis de los ocho votos que se requieren legalmente; otro ejemplo es el ‘blanqueo de habilitaciones o de la construcción’ que, si bien el actual intendente al asumir dio marcha atrás con la norma con duras críticas, esta había sido implementada gracias a los votos de concejales de JxC; y podemos sumar también la estrategia de “decir una cosa y hacer otra”, muy utilizada en las contrataciones y compras, esquivando la obligación de licitar públicamente.

Por esto y más, y en cumplimiento de nuestro rol en la Concejalía, es que vemos necesario realizar el seguimiento permanente para lo cual aportamos información y un breve análisis de los siguientes puntos:

 

1- Esquema de ingresos y gastos del municipio. La política económica y su impacto en las Administraciones Públicas.

Para entender la situación de superávit que tiene hoy la actual gestión municipal de Roy Nikisch, es necesario mencionar brevemente algunos aspectos de la intendencia de Gustavo Martínez (2019/23).

Dicho gobierno estuvo caracterizado por la inacción, ya que durante los dos primeros años con la pandemia de coronavirus como justificativo, fueron un desafío el pago de salarios y la atención de los servicios esenciales, condición que se extendió durante los restantes dos años de gestión, excepto en áreas abocadas a recolección de residuos y algo de limpieza. Toda esta situación naturalmente generó un superávit que se consolidó con un aumento en la recaudación (nominal) producto de la creciente inflación. Este incremento en los ingresos versus gastos en baja, proporcionaron las condiciones para que el último año y medio de la gestión de Martínez se exprese con un excedente de caja todos los meses; y como la masa salarial comenzó a tener menos participación en los ingresos totales, en los últimos dos meses los recursos acumulados fueron de seis masas salariales, lo que claramente demuestra que el superávit se logró en detrimento del salario municipal, entre otros.

Hoy, el liberalismo convence al pueblo con que el problema es el Estado y avanza con una política de destrucción del mismo, que incluye el sistema previsional, las empresas públicas, la ola de despidos, la entrega de nuestra soberanía y recursos naturales, entre otros; y con la inflación como herramienta elegida históricamente por los gobiernos libertarios para abaratar ‘el costo argentino’, acompañado por el congelamiento de los ingresos o poco aumento salarial, pasamos a estar todos los días un poco más pobres, es decir, con el mismo sueldo vamos comprando o adquiriendo cada vez menos cosas. Esta política que es avalada y sostenida por Zdero en la provincia y por Nikisch en la ciudad, constituye uno de los factores principales que impacta en la administración del Municipio y en la calidad de vida de las y los resistencianos.

2- Alta inflación y ajuste negativo de salarios (muy por debajo del IPC)

Durante los dos primeros años de la gestión de Martínez, pagar los sueldos consumía más del 90% de los recursos (que en el mismo mes del 2023 le representó el 41%, incluyendo salarios de trabajadores y trabajadoras que ingresaron a la planta permanente y que sin embargo, la nueva gestión de Nikisch denunció por su alto impacto en el presupuesto, lo que es falso). (Ver Cuadro)

En el último año y medio se dio un acelere del proceso inflacionario, que trajo consigo un incremento nominal de la recaudación e ingresos del Régimen de Participación Municipal, quedando en decisión de funcionarios/as si estos mayores recursos serían destinados en todo, parte o nada, a la actualización salarial de agentes municipales, quienes finalmente se vieron perjudicados por los efectos de la inflación que precipitó la caída del salario real. Este estancamiento en los salarios le permitió a Martínez llegar al mes de octubre del 2023 con un excedente presupuestario que sumado al de noviembre del mismo año, favoreció la transferencia de $13 mil millones al Fondo Fiduciario por donde realizaba las compras.

Este Fondo liquidado al 30 de noviembre, fue ratificado luego por Roy Nikisch, y a la fecha, pese a que la nueva gestión dice haberlo denunciado y a los informes que hemos solicitado sin respuesta, el Tribunal de Cuentas dice no haber controlado el tema y se desconoce el destino de esos miles de millones. Y un dato que no es menor, además de haber aprobado la resolución de liquidación del Fondo, la actual gestión está pagando deudas millonarias que en casos, no tienen documentación que compruebe la prestación de servicios al Municipio.

En los primeros meses de este 2024, el crecimiento de los ingresos municipales se profundizó por la mayor inflación que provocó el gobierno de Milei a nivel Nacional haciendo que, pese a algunos aumentos que se otorgaron en 2023 y lo que va del 2024, la participación de los sueldos, en el Gasto Total, se mantenga en torno al 40% de los Ingresos Corrientes. Situación que se da en el mismo escenario de mayor recaudación, ya que si comparamos los recursos recibidos, con lo presupuestado, podemos ver que en los primeros cinco meses (enero a mayo) la gestión de Nikisch recibió un 70% más de recursos de lo que se había presupuestado, sumando un excedente de $14.330 millones. (Ver Cuadro)

3- Subejecución presupuestaria y cero Trabajo Público. Ajuste operativo extremo del primer semestre. El superávit que afecta la calidad de vida de la ciudadanía, y el salario de las y los trabajadores.

Ante la realidad descripta sobre los ingresos, sería lógico pensar que la gestión actual de Nikisch estaría cumpliendo con sus obligaciones, entre las más esenciales: recolección, tratamiento y disposición final de RSU, alumbrado público y mantenimiento de caminos, entre otros, no obstante, no solo se sacó de encima la obligación de mantenimiento del alumbrado público devolviéndoselo a Secheep, y que las obras de bacheo y arreglo de calles las está realizando Vialidad Provincial con su presupuesto, sino que con esta alta disponibilidad de recursos no pueden ejecutar un buen servicio público de recolección de residuos sólidos urbanos, ni avanzar en el tratamiento y disposición final dejando abandonados a muchos sectores de la ciudad.

La ausencia del Municipio que no solo se la ve en barrios, espacios verdes, etc, también se refleja en la ejecución presupuestaria, ya que surge de información oficial que solo se ha ejecutado el 60% del Presupuesto previsto para el primer trimestre, es decir que de cada $100 que se preveía gastar, solo se ejecutaron $60. La partida “Trabajo Público” está en cero pesos ($0) de ejecución, por tanto podemos ver que la “Austeridad” de la que habla el Intendente, es la del NO HACER, así es que el ahorro que se tuvo no es esfuerzo de la gestión, sino la privación a vecinos y vecinas de Resistencia de recibir los servicios básicos y demás prestaciones municipales, como recolección de residuos, alumbrado, limpieza, desmalezamiento, arreglo de caminos, entre otros. Además de continuar sosteniéndose en reducción y caída del salario real de las y los trabajadores municipales.

Hasta acá podemos concluir que, el contar con más recursos de lo esperado y que los gastos o inversiones que se debían hacer no se hicieron, han generado un gran superávit, un gran excedente, que no solo es promovido por el actual gobierno sino también celebrado, pero creemos necesario aclarar y recordar que NO es incumbencia del Municipio la de ahorrar para hacer inversiones financieras y comprar herramientas o maquinarias caras al contado; y que SI tiene la obligación el Intendente, de cumplir y hacer cumplir las ordenanzas, realizar la prestación de los servicios públicos, realizar las obras necesarias, acompañar y promover el desarrollo de los distintos sectores de la ciudad, promover la participación, que su gestión sea transparente, que permita el acceso a la información pública, y más. De lo contrario, el ahorro logrado es en detrimento de la calidad de vida de la ciudad y ejerciendo un mal desempeño de las funciones públicas a su cargo.

 

4- A cuánto llegan los recursos acumulados y qué se podría hacer con estos recursos.

Como dijimos anteriormente, esta situación de excedente de recursos que se expresó en la última parte de la gestión de Martínez, y que le permitió transferir alrededor de $13 mil millones al Fondo Fiduciario con el que realizaba las compras, sin haber tenido una rendición clara la asignación de los mismos, ahora se repite en el gobierno actual de Roy Nikisch, quien ya habría acumulado un monto similar en los cinco primeros meses del año, alcanzando un saldo de $17 mil millones, que si dejamos las Disponibilidades afuera atento al pago de sueldos y aguinaldos, el saldo injustificado acumulado rondaría los $13.300 millones, lo que medidos en meses equivale a cinco masas salariales.

Nos parece desproporcionado el nivel de ahorro acumulado teniendo en cuenta que su mayor fuente de recursos es el ajuste de la masa salarial, la falta de prestaciones de servicios, la no continuidad de las obras públicas y la falta de respuestas a la mayoría de los sectores que acudieron con demandas a la Municipalidad, todas son incumbencias principales de una gestión municipal y la gran mayoría están incumplidas, pero posiblemente no se percibe con claridad, ya que organismos provinciales suplen la ejecución de obras de bacheo y pavimentación, así como de reposición y arreglo de partes del alumbrado público.

Lo cierto es que tenemos un gobierno municipal que cuestiona o denuncia aspectos de la gestión anterior en los medios, pero en la práctica, en estos seis primeros meses de gestión, procedió de igual manera, en detrimento de la calidad institucional, de la calidad de vida de todas y todos, del patrimonio municipal (agravado en el caso de querer acceder a un crédito de $3.200 millones de pesos), y de los bolsillos de trabajadores y trabajadoras municipales. Da la sensación de que esto solo puede hacerse teniendo las malas intenciones correspondientes o bien, por incapacidad para ejecutar el presupuesto municipal.

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