Massa y Rossi para generar empleo, recomponer salarios y bajar la inflación

 

El próximo 22 de octubre los argentinos y las argentinas tenemos la posibilidad de elegir Unión por la Patria, construcción que sintetiza en Sergio Massa y Agustín Rossi, una propuesta que prioriza los derechos del trabajo, de la salud y de la educación pública, y no se esfuerce por ajustar el presupuesto público, generar más inflación y así abaratar el costo laboral argentino; que no libere el mercado cambiario  promoviendo el ingreso de capitales especulativos, ni tomar deuda o liquidar el patrimonio nacional para financiar la fuga de capitales.

Unión por la Patria propone un camino de crecimiento económico, de desarrollo con inclusión social, de defensa de la bandera de la soberanía nacional y los derechos humanos, frente a la política del endeudamiento, el ajuste, la desindustrialización y la represión. 

 

El modelo Bullrich: profundizar las políticas de Macri

 

El modelo que propone Patricia Bullrich es el de profundizar las políticas aplicadas en el gobierno de Macri, lo que trae consigo relaciones carnales con Estados Unidos y el FMI: la apertura a la especulación financiera y el ajuste del Estado para hacer más lugar al pago de la Deuda Externa con la que Macri financió la fuga de 83 mil millones de dólares para atender las ganancias de la “timba financiera” que se quería guardar en el extranjero (plata de todos los argentinos y las argentinas, de la que no vimos un sólo billete, pero hoy la debemos). 

Cuando nuestro país fue endeudado en más de tres reservas del Banco Central, la actual candidata de Juntos por el Cambio fue una de las principales funcionarias de la gestión que apoyó el mayor crédito de la historia del FMI, y que hoy, propone un “blindaje financiero”, lo que significa llevar a la Argentina a un nuevo acuerdo con el organismo.

Hoy estamos viviendo las consecuencias de esa “ayuda” financiera del FMI, la que implica la pérdida de la soberanía económica y de derechos para los trabajadores a través de ajustes, la flexibilización laboral, menos salud, menos educación, menos obra pública y más desempleo.

 

El modelo Milei: terminar con la educación y la salud pública, generar más inflación para dolarizar 

 

Lo novedoso es Javier Milei, novedoso porque es una cara nueva y su forma de comunicar es particular y hasta original, pero no así por sus propuestas o las políticas que adelanta como eje de gestión, ya que todo el “librito” que las contiene fue aplicado por Martínez de Hoz, el primero Ministros de Economía de la Dictadura Militar del 76´, y Domingo Cavallo, de las presidencias de Menem y De La Rúa, ambos muy allegados a la familia y la gestión de Macri. 

Este candidato se da el lujo de no mentir, diciendo que va a terminar con la educación y la salud pública, que va a generar más inflación para así poder dolarizar y dar toda la libertad a los capitales extranjeros para que vengan a quedarse con todos los recursos naturales y hasta con nuestros “órganos”. Pero todo parece no haberse dicho nunca y ante el enojo, la bronca y revancha que expresa parte de nuestra sociedad al definirse afín o votarlo –  algo que claramente se ve contradictorio y complejo, pero es la realidad que han podido lograr desde quienes diseñaron desde el exterior esta alternativa, entre estos Fondos Buitres, de los más grandes – no genera más que inestabilidad, desempleo, exclusión, y amplía la brecha entre ricos y pobres. 

 

La única alternativa para el pueblo

 

La historia nos muestra cuáles son las consecuencias de las políticas que pretenden volver a implementar Bullrich y Milei. Solo mirando y recordando antecedentes de gestión, cae de maduro que la fórmula Massa / Rossi, es la alternativa electoral donde el pueblo trabajador debe volcar sus expectativas, un gobierno que trabaje  para conducir al país a superar la trampa económica que generó la gestión de Macri, donde todo dólar generado es del FMI; para volver a retomar un camino de crecimiento, de desarrollo, de distribución de la renta, que nos permita recuperar el poder adquisitivo del salario e ingresos, como en el 2015 que la jubilación mínima y el salario mínimo superaban los 600 dólares,  siendo que hoy no llegan a 200 dólares. 

Un gobierno que defienda el Estado, la salud y la educación pública, que cuide el trabajo y bregue por los demás derechos de las y los trabajadores. Que defienda los medicamentos gratuitos para las y los jubilados, los recursos naturales y la soberanía argentina.

Este es hoy, el único camino para el pueblo argentino.

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